Mucho hemos oído sobre este término que al parecer aplica a muchas compañías de distintas ramas. ¿Pero qué es realmente?
¿Qué es una Startup?
Se trata de empresas pequeñas o medianas recién creadas, comúnmente desarrolladas para fines tecnológicos. Se crean a partir de una idea de negocio innovadora que utilizan varios recursos para convertirla en un negocio rentable.
El problema principal de este tipo de compañías radica en convertirse en empresas sumamente rentables, pero debido a que suelen ser creados por personas con poca experiencia en los negocios que no saben cómo manejarlo, acaban siendo compradas o absorbidas por empresas más grandes.
Este tipo de empresas suelen crecer gracias a las inversiones de personas interesadas por el medio, de ahí a que sea un paso más fácil para ser absorbidas por empresas más grandes si el negocio se empieza a ir para abajo, pues las compañías importantes además de ganar “una empresa más”, ganarán a los inversores que habían apostado por esta.
Recientemente, la adición de WhatsApp e Instagram a Facebook es el ejemplo más claro de lo que sucede con las startups actuales que no tienen un plan de crecimiento y de marketing adecuado.
Pasos para sacar adelante tu startup
Si tú tienes una idea que crees que podría ser revolucionaria, aquí tienes 5 pasos para crear tu propia startup y ser una persona exitosa de negocios en poco tiempo.
1. Identifica una oportunidad
Probablemente tengas una idea para mejorar las aplicaciones de Mensajería Instantánea. Pero si no tiene algo verdaderamente especial o algo que haga a tu empresa única y diferente, difícilmente podrás sobresalir en el medio y ser reconocido.
Así que antes de comenzar a apostar por un negocio, asegúrate que:
• Nadie lo haya hecho antes
• Si alguien lo intentó antes que tú, descubre qué hicieron mal
• Cubra necesidades que no han sido satisfechas
• Otorgue más soluciones que problemas
Si tu negocio cubre estas características, vas por buen camino.
2. Sondea el mercado
Claramente un negocio sobre surf no va a funcionar en un país o en una ciudad que no tiene salida al mar. Así que asegúrate de que esa oportunidad de negocio tenga verdaderas posibilidades de desarrollarse en el lugar en donde estás.
Puedes hacer preguntas entre tus conocidos sobre si les interesaría contar con una app o con un dispositivo que cubra esa necesidad, y basado en las estadísticas podrás notar qué tan necesario es que se desarrolle un negocio o no. Estos análisis servirán para hacer notar las capacidades y deficiencias de un modelo empresarial en el mundo real.
3. Identifica tu público objetivo
Aunque es un análisis similar al de sondear el mercado, más que preocuparte en este paso por saber si cubre una necesidad o no, tendrás que preguntarte para quién es importante cubrir esa necesidad.
Es probable que si desarrollas una alerta de acoso callejero, prefieras dirigirte exclusivamente a mujeres de 15 a 30 años pues a un rango diferente de edad podría no parecerle tan importante o relevante tu negocio.
Es primordial pensar desde el principio quiénes y qué tipo de personas podrían ser tus compradores potenciales, pues una vez que los tengas en cuenta podrás añadir otras características o cubrir otras necesidades que presente ese mismo grupo y que puedan ser implementadas a tu negocio.
4. Desarrolla un plan de acción
En este paso deberás plantearte todas las metas de tu negocio y las formas de cumplirlas. Ya tienes tu modelo de negocio identificado y el tipo de público al que te vas a dirigir, así que lo que sigue es pensar cómo lo vas a sacar adelante. Este paso también incluye medir la cantidad necesaria para desarrollarlo.
Si tú mismo no te dedicas al desarrollo web o no sabes nada sobre lenguajes de programación, debes contemplar lo que costaría contratar a un desarrollador, un diseñador, e incluso quizás a algún distribuidor.
Teniendo esto en cuenta, podrás seguir sumando los gastos que haya que llevar a cabo, para que una vez que tengas listo el presupuesto total, puedas decidir llevarla a cabo por ti mismo (al menos para los primeros pasos) y conseguir inversionistas para darle mayor publicidad.
Actualmente existen plataformas que pueden ayudarte a conseguir estas inversiones, tales como Kickstarter, en la cual subes la idea de tu proyecto (con metas muy específicas y un desglose de los gastos que deberán llevarse a cabo) para comenzar a conseguir inversores. Estas páginas cuentan con categorías, y los donantes pueden variar desde personas comunes (normalmente parte de tu público objetivo) hasta inversores profesionales. Estas personas participan debido a que la mayoría de los negocios les promete algún tipo de agradecimiento por ayudar a convertir su negocio en algo real, según la categoría pueden otorgar algún ejemplar del producto creado, o en estos casos, la adquisición de la aplicación de forma “gratuita”.
Si se llega a la meta, podrás desarrollar tu negocio sin problema alguno. Y si no obtienes la inversión solicitada, el dinero se les devuelve íntegramente a todos aquellos quienes hayan participado.
5. Llévalo a cabo
Suena como el paso más sencillo, pero la verdad es que esto no podría realizarse si hiciera falta cumplir con algún paso de los antes mencionados.
Una vez que tengas todos los recursos para hacer realidad tu startup, podrás dedicarte a implementar mejoras y actualizaciones para que sigas llegando cada vez a más público y compradores reales.
Tener una compañía en constante renovación demostrará que estás interesado en ofrecer el mejor servicio con tu producto.
Puede sonar difícil (sobre todo el paso de conseguir inversión, lo que se dificultará aún más si debes poner parte de tu propio capital) pero si tienes una idea que cubra una necesidad importante, valdrá la pena intentar llevarlo a cabo.
Defiende tus ideas y aprende de tus errores, verás que ambos pasos te garantizarán un éxito seguro en poco tiempo.